Disertación en sala Acuña de Figueroa
Esta mañana se realizó un conversatorio denominado “Mujeres desaparecidas en Uruguay, posibles conexiones con la trata de personas” en el marco del Día Mundial contra la trata de personas y a un año de la aprobación de la Ley Integral de Prevención y Combate a la Trata de Personas.
La actividad, desarrollada en la sala Acuña de Figueroa del edificio anexo al Palacio Legislativo, fue organizada por la Asociación Civil El Paso, en cooperación con la Unión Europea a través del Proyecto Uruguay Mira la Trata.
En la apertura participaron la Diputada Cristina Lústemberg; el Jefe de Sección Política, Prensa e Información de la Delegación de la Unión Europea en Uruguay, Tomaz Gorisek; y la Coordinadora del Proyecto Uruguay Mira la Trata y Directora de ONG El Paso, Cristina Prego.
El Conversatorio, denominado “Mujeres desaparecidas en Uruguay, posibles conexiones con la trata de personas”, fue integrado por: la Directora del Instituto Nacional de las Mujeres, Mariella Mazzotti; la Encargada de la División Políticas de Género del Ministerio del Interior, July Zabaleta; el Fiscal Adjunto de Corte, Ariel Cancela; el Presidente de Conapees, Luis Purtscher; por el Ministerio del Interior, Francisco Guillén; y por el Proyecto Uruguay Mira la Trata, la Directora de la ONG El Paso, Andrea Tuana.
Las autoridades coincidieron en lo complejo de la trata de personas, en el valioso aporte de la Ley Nº 19.643 (Prevención y Combate a la Trata de Personas) a fin de visibilizar el tema, y estimaron que es necesario definir, presupuestar e implementar políticas públicas “fuertes y consolidadas”. Indicaron que no alcanza el acompañamiento en salud mental, ni las reparaciones, y por tanto se precisa un mayor esfuerzo a través de saltos “cualitativos y cuantitativos” en la materia.
Al analizar los casos de desapariciones existen tres grandes líneas de investigación: las desapariciones voluntarias, los casos relacionados a problemas de salud mental (suicidios) y la captación para redes de trata sexual.
Según la Asociación Civil El Paso, la dificultad en nuestro país se centra en esta última línea de investigación, que no se logra profundizar por la escasez de recursos, lo que produce que los casos se vayan “enfriando” y las desapariciones queden sin resolver.