Honorable Asamblea General
Agradezco el altísimo honor que acabáis de hacerme confiriéndome con vuestro voto la investidura de Presidente Constitucional de la República.
Hablo ante vosotros teniendo presente la soberana y augusta representación del pueblo Oriental.
Ante él pues, ante su voluntad que acato y ante su juicio que espero, acepto este mandato cuya magnitud y cuyas responsabilidades ya empiezo á meditar y á sentir desde este momento.
Soldado de la libertad en ella están reconcentrados mis ideales.
Guardián de la Ley; á mantener su integridad y su brillo puro é inmaculado, se contraerán todos mis anhelos.
Dirigir los destinos de la Patria en su aceptación amplia, noble y grande, á eso desde hoy está consagrada en absoluto mi existencia.
Vengo á este puesto con el alma exenta de prevenciones, odios ó rencores.
Desde él no diviso sino un pueblo de hermanos considerando de la misma manera entre los que lo son por el origen de la Nacionalidad á los que desde otras tierras del globo han venido á la nuestra para levantar en ella el hogar de sus afecciones, á escoger el campo de su labor.
Días claros y serenos ha preparado el digno ciudadano que acaba de hacer renuncia del puesto que por delegación constitucional ejercía á la cabeza de la Nación, para la Nación que hoy inauguro.
A él pertenecerá el éxito de la jornada que hoy empieza bajo los benditos auspicios de la conciliación de la familia oriental á cuyos propósitos y aspiraciones me adhiero con toda el alma.
Vengo con fe a este puesto porque vengo confiado en la inteligencia, los esfuerzos y la buena voluntad de todos mis compatriotas.
Decid al pueblo que ha delegado en vosotros su soberanía, que yo he salido de él y que jamás me he encontrado más confundido con él que hoy que me ha elevado á este puesto, desde donde alcanzo á ver todas sus necesidades y sentir todas las palpitaciones de su inmenso corazón.
Señores Senadores, señores Diputados:
Al aceptar el honroso cargo que me habéis conferido, no me resta más que pronunciar un última palabra que mando á todos los ámbitos de la República:
A trabajar en paz por los intereses de la Patria.