Amnistía Internacional presentó informe en Antesala del Senado
Se presentó esta tarde en la Antesala de la Cámara de Senadores el informe: “Disparar a matar; estrategias de represión de la protesta en Nicaragua”.
El encuentro fue organizado por Amnistía Internacional y contó con la participación de la directora para las Américas de Amnistía Internacional, Erika Guevara Rosas; la representante del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos, Vilma Núñez, y la familiar de una de las víctimas de represión en Nicaragua, María Graciela Martínez.
Amnistía Internacional es un movimiento global de más de 7 millones de personas que trabajan en favor del respeto y la protección de los derechos humanos. Una organización independiente de todo gobierno e ideología política, interés económico y credo religioso. El informe presentado en el encuentro relata una misión de Amnistía Internacional realizada en Nicaragua del 4 al 13 de mayo de 2018, con el fin de investigar las denuncias graves de violaciones a los derechos humanos. El documento se basa en más de 30 entrevistas personales, en el estudio y la documentación de 16 casos. El trabajo presenta siete elementos de la estrategia represiva en Nicaragua: un discurso oficial de negación; la utilización de grupos parapoliciales; el uso excesivo de la fuerza; las ejecuciones extrajudiciales; las irregularidades en la investigación; la denegación de atención médica; y el intento de control de la prensa.
La Senadora Constanza Moreira, presidenta de la Comisión de Asuntos Internacionales, y el Senador Pablo Mieres, integrante de la Comisión de Asuntos Internacionales brindaron sus puntos de vista sobre el tema.
Moreira destacó el rol de las mujeres en la defensa de los Derechos Humanos. Sobre el informe se centró en tres puntos neurálgicos y concluyentes: el uso excesivo de la fuerza, las ejecuciones extrajudiciales y las irregularidades en la investigación. Estos refieren a una alarmante cantidad de muertos y heridos y el uso de la fuerza desproporcionada por parte de las autoridades; el uso de armas de fuego en forma letal; las presiones a familiares para desistir de la denuncia; los informes médico forenses fraguados sobre las víctimas y falta de diligencia en los procesos policiales y judiciales, como forma de ocultar la verdad y la justicia. La Senadora catalogó la situación como “un escenario de impunidad”. Indicó que la violación a la libertad de prensa por el gobierno, el rol de los medios, y la falta de acceso a la información deben ser tenidos en cuenta.
La Senadora leyó la declaración sobre Nicaragua realizada por el Senado del Uruguay el pasado 17 de julio:
Ante la reiterada violación de los derechos humanos y las libertades fundamentales en Nicaragua, el Senado de la República Oriental del Uruguay
Expresa su enérgica condena a todos los actos de violencia y violaciones a los derechos humanos, alentando a que se proceda a identificar a los responsables a través de los procedimientos legales correspondientes;
Exige al gobierno de Nicaragua el cese inmediato de la violencia contra el pueblo nicaragüense;
Insta al gobierno de Nicaragua y a todas las partes que participen de buena fe en el Dialogo Nacional;
Expresa que la celebración de elecciones libres, justas y oportunas en un ambiente libre de miedo, intimidación, amenaza o violencia, es la mejor garantía de estabilidad democrática.
Mieres subrayó el papel desempeñado por Amnistía Internacional como una organización de denuncia de los derechos humanos. Señaló que en Nicaragua se violan los derechos humanos de los ciudadanos por la mera manifestación de discrepancia. Sostuvo que las elecciones de abril fueron fraudulentas, donde se proscribieron candidatos y partidos opositores, se presentaron denuncias de corrupción y violación de derechos humanos. El Senador enfatizó que la escalada represiva del gobierno nicaragüense quiebra su legitimidad.
Las representantes extranjeras coincidieron en expresar que la represión se orienta hacia los jóvenes. Expusieron cifras que demuestran un recrudecimiento de la violencia y graves síntomas de deterioro a las libertades de expresión. Recalcaron la participación de grupos parapoliciales en la represión, en los ataques y en el actuar fuera de la ley. Sostuvieron que estos grupos actúan con la aquiescencia y tolerancia de las autoridades estatales, en especial la Policía Nacional. Denunciaron la denegación de atención médica a las víctimas y el control de los medios de comunicación.
La Directora para las Américas de Amnistía Internacional, Erika Guevara Rosas, manifestó que mantiene un diálogo abierto con el Presidente Tabaré Vázquez, por la situación en Nicaragua, así como el compromiso en ayudar a la población nicaraguense en materia de derechos humanos.