El diputado Carlos Varela, en su media hora previa, se refirió a que “el pasado 9 de junio nos despertamos con la tristísima noticia que había fallecido el compañero Carlos Gamou, legislador en esta Cámara por tres períodos.
Lo conocimos en el año 1989, en el grupo de estudiantes de la licenciatura de ciencia política, se destacaba un compañero por su forma de expresarse, cultura general que demostraba, por la firmeza y por la responsabilidad con que encaraba las distintas materias…era Carlos Gamou. Nos hicimos amigos, compañeros de estudio y nos enteramos ahí que era frenteamplista. En el año 1993, con otros compañeros y compañeras, nos acercamos a Danilo Astori, en los grupos que luego terminaron conformando Asamblea Uruguay, por lo que fue elegido diputado en el año 1995.
Circunstancias de la vida hicieron que, luego, Carlos integrara otros sectores del Frente Amplio por los cuales también fue electo diputado. Quiero destacar que, en ese trayecto, jamás hubo una palabra de reproche, ni una crítica a los sectores por los cuales transcurrió, algo que en política no es tan común.
Siempre un reconocimiento, un agradecimiento a la experiencia política compartida, primero en Asamblea, luego en izquierda abierta, en el MPP, en la CAPL, sectores que integró.
Quiénes compartimos con Carlos la cámara de diputados, supimos de su capacidad como orador, como un gran polemista, un hombre universal de una gran cultura, estudioso de los temas, sobre todo los temas presupuestales. Era un filósofo, estudiaba todos los temas, tenía esa característica que lo hacía difícil discutir con él, en el último período en que fue legislador, utilizaba una terminología que lo hacía particularmente distinguido, utilizaba citas en latín, lo que generaba la incertidumbre si lo lo que decía era positivo o negativo.
Un hombre con mucha inteligencia por la forma como componía sus intervenciones, el peso de las mismas, la veracidad de las mismas, pero siempre respetuoso de todas las opiniones.
Era muy difícil que utilizará una actitud que no fuera absolutamente democrática - republicana, escuchaba con atención todas las opiniones, las rebatidas, pero siempre con un nivel alto, siempre existió un reconocimiento por el otro.
Tuvo quebrantos de salud muy importantes…muy importantes, que en los últimos años limitaron muchísimo su capacidad de participación, de movilización, pero nunca su capacidad de compromiso. Hasta el último día de su vida llamaba por teléfono a nuestros despachos, daba ideas, proponía proyectos pero nunca intentaba ser protagonista, colaborando para que otro siempre estuviera atento a la realidad. Siempre estuvo atento a su Frente Amplio, preocupado por la unidad y, fundamentalmente, preocupado por las instituciones. Quienes tuvimos el privilegio de compartir la vida, o una parte de su vida, nos sentimos distinguidos por haber tenido esa oportunidad, no está físicamente pero está entre nosotros, y en esta Cámara está su historia muy valiosa que ha enriquecido el trabajo parlamentario”.