La descentralización como factor de mayor participación e involucramiento, el necesario crecimiento sostenible y amigable con el ambiente, una infraestructura acorde a los nuevos tiempos y la proyección de la problemática que deriva de nuestra situación demográfica, fueron algunos de los aportes que el Presidente de la Cámara de Representantes dejó planteados al inaugurar el panel “El Parlamento y el Futuro”.
José Carlos Mahía recordó que a nivel legislativo quedó instaurado por ley el “Día del futuro”, que se celebra anualmente el último lunes de setiembre y que ahora resta la integración de una Comisión especial que apunte a pensar, identificar problemas y buscar soluciones en temas centrales para el país.
La idea –dijo- es que esta Comisión tome los temas que nos desafían como sociedad, con la intención de encararlos en forma anticipada y que permita dar saltos cualitativos, en tiempo y forma, en pos del desarrollo nacional.
Uno de los objetivos es un país próspero donde la gente tenga mayores oportunidades, mejores condiciones de vida y un ejercicio pleno de los derechos desde la primera infancia hasta la vejentud.
Mahía recordó el papel que en sentido similar cumplió la CIDE, Comisión de Inversiones y Desarrollo Económico, donde hubo aportes y miradas diferentes para generar políticas de largo aliento.
Como aporte a lo que luego desarrollarían destacados panelistas y legisladores, el Presidente dejó planteados cinco aspectos que, desde su visión, el Uruguay debería poner sobre la mesa para intentar no estancarse en lo político, económico y social.
En primer término y como aspecto central habló de la necesidad de incluir la mayor participación e involucramiento de la sociedad en los temas que hacen al quehacer público. Se refería a la descentralización en su más puro concepto, es decir que abarque a la ciudad, villa, pueblo o barrio y utilizó de ejemplo el Consejo de Ministros que hoy tiene lugar en 19 de Abril, pequeño poblado del departamento de Rocha.
En segundo lugar Mahía manifestó la necesidad de que el país crezca pero que lo haga en forma sostenible y con políticas amigables con el medio ambiente, utilizando los recursos naturales en forma responsable y pensando en las nuevas generaciones.
Una tercera propuesta, ligada a la anterior, tiene relación con el desarrollo de una infraestructura acorde a las necesidades del futuro.
Especial desafío para el Presidente del Cuerpo tiene la educación, cuarto elemento para repensar el país, donde –según dijo- se debe buscar igualdad entre Montevideo e interior y, dentro del interior, entre los centros urbanos y los rurales. En este sentido habló de la necesidad de tener currículas que, además de incorporar conocimiento, se adapten al mundo del trabajo que se viene. Como un desafío concreto en esta área Mahía se refirió a la Universidad de la Educación.
En quinto y último término, el Presidente afirmó que se debe pensar en políticas públicas que se adecuen a la estructura poblacional del país. “Esta es quizás una de las mayores deudas que se tienen y no realizarlo supondrá un cuello de botella para el Uruguay que anhelamos” señaló.
Sobre el particular recordó que vivimos en un país envejecido y macrocefálico, con solo un 5% de la población en el área rural.
Al finalizar su exposición el Presidente Mahía saludó la iniciativa y adelantó su interés de contar con más ámbitos de discusión donde levantar la mirada de los temas coyunturales y pensar el país que se viene.