El diputado -en su tiempo como orador en la media hora previa- comenzó refiriéndose a que hay personas que no vinculan, o relacionan, lo que les sucede con acciones concretas de los gobiernos.
Hay una suerte de realidades que parecen no tocarse, que no se vinculan.
Podría ejemplificar con situaciones donde millones de ciudadanos, por ejemplo, terminan votando a una persona que denigra, que estigmatiza. Podría hablar también, de intendentes que son criticados por su estilo de clientelismo, incluso atropellando la ética, donde se benefician siempre los mismos amigos de ese intendente que actúa como “patrón de estancia”, pero siguen siendo reelectos.
Supongo, acotó el diputado, que la academia estará estudiando este fenómeno y nos podrá ayudar a comprenderlo.
Ahora quisiera referirme a situaciones que competen a la educación, más precisamente en el Liceo de José Enrique Rodó, del departamento de Soriano. Se prendió la alarma ante una comunicación de la ANEP que daba cuenta de la posibilidad de eliminar los cursos de bachilleratos presenciales y pasarlos a libres asistidos.
Antes del 2016 la comunidad educativa luchó por conseguir este 3er. turno, cada año fue arduo el trabajo de tener que salir a buscar los alumnos, presentarlos y después esperar para ver si el curso se abría o no. Se logró el turno en el 2016, desde ese año a la fecha hubo muchos vecinos y vecinas que terminaron el liceo y hoy están estudiando en la Universidad o en Formación Docente, con un promedio de 12 alumnos egresados por año.
Estamos hablando de un área de 3000 habitantes en la zona de Rodó, Egaña y Risso. El 14 de octubre, se informó de la posibilidad del cambio de modalidad en dicho turno, de ser semestral y presencial a la modalidad de libre asistido para 4°, 5° y 6° de bachillerato.
Ante ésto, se realizó una rápida preinscripción hasta el 19 de octubre para tener las proyecciones para el próximo año, y hay cerca de 80 personas interesadas en hacer estos cursos en la zona de Rodó, Risso, Egaña e incluso Palmitas, zona denominada “la línea” de la Ruta 2.
Todo esto se puso en conocimiento de las autoridades educativas, así como una nota de los alumnos actuales, que solicitaban que se mantuviera esta modalidad presencial. El 3 de noviembre, llega el planillado del plan 94 donde el 3er. turno ya no está. Ese mismo día, asistimos a la Asamblea abierta donde profesores, alumnos y egresados, compartieron información y experiencias vividas.
Con respecto al cambio de modalidad sugerido, podemos advertir la problemática que esto significa, la necesidad de tener los cursos presenciales para muchos estudiantes, ya mayores o al frente de sus familias o de sus trabajos, significa o arroja como resultado, que en el liceo se sienten mucho más acompañados, despejan sus dudas, y como conclusión podríamos advertir, que la soledad del campo o medio rural les hubiera hecho desistir de continuar estudiando.
En muchos lugares hay problemas de conectividad y hay personas que no disponen de los medios adecuados para el estudio en plataformas. Escuchamos y vimos cómo la comunidad educativa de la zona se enriquece con estos cursos, la persona que estudia, su entorno y toda la sociedad. El perjuicio ya está hecho al no incluir estos cursos en el planillado, los docentes que vienen perdiendo salario deberán elegir horas y asegurarse el trabajo para el 2023 lo antes posible y en las elecciones de diciembre dicho turno no va a estar.
Ojalá se mantenga la modalidad presencial, aunque haya que empezar en marzo nuevamente a buscar docentes para que cubran el curso, pero será consecuencia de las decisiones de hoy.
¿Cuál es el motivo para pasar a libre asistido?; ¿El liceo está en perfil de baja matrícula?... No.
¿Los logros pedagógicos para la comunidad educativa son importantes y exitosos?...Si, entonces no se entiende.
Las decisiones que se toman…luego repercuten. Si se decidió sacarle 144 millones de dólares a la educación, tarde o temprano se va a sentir en el poder adquisitivo de los docentes, en menos horas, en reducir o eliminar programas, por algún lado hay que recortar para sobrevivir con menos recursos.
“No importa el alumno, no es verdad que sea el centro, por tanto miremos la realidad y no el relato de esa realidad”, finalizó el diputado.