Recomendación y pedido de información
Atendiendo la compleja situación que actualmente existe en el Módulo 8 del COMCAR –que tiene más de 500 internos y también afecta a otros módulos de la Unidad– el Comisionado Parlamentario pidió al Ministerio del Interior y al Instituto Nacional de Rehabilitación “un plan de normalización” que en base a las Reglas Mandela, con seguridad y medidas socio educativas, baje la conflictividad del lugar.
Días atrás el Comisionado Parlamentario elevó a la justicia penal actuante, a las autoridades penitenciarias y a diversos organismos de políticas social, un informe dando cuenta de las críticas condiciones del Módulo 8 de la Unidad Nº 4 del Instituto Nacional de Rehabilitación, el COMCAR. Ahora, ante diversas quejas y denuncias recibidas sobre constantes expresiones de violencia entre los internos –amenazas, chantajes a las familias, incidentes y enfrentamientos–el Comisionado envió una nota al Ministerio del Interior y al Instituto Nacional de Rehabilitación recomendando medidas urgentes para bajar la violencia y mejorar los niveles de rehabilitación y convivencia en el lugar. La nota recomienda realizar urgentes contactos con otros organismos de política social para volcar recursos a la acción planteada y pregunta si las autoridades tienen los medios para llevar adelante las medidas básicas planteadas.
La nota dice que: “Las reuniones de trabajo con funcionarios y autoridades, diálogos in situ y constantes recorridos que realizamos, nos muestran que los funcionarios están agotados, sintiendo que sus enormes esfuerzos no son suficientes y que están necesitando no solamente refuerzos sino la llegada de funcionarios, técnicos y educadores líderes para revertir el actual clima de convivencia, amén de refuerzos materiales y logísticos. La actual situación de extrema complejidad y riesgo para las vidas de todos quienes se encuentran tanto en el Módulo 8 como en los Módulos 3 y 11 requiere la adopción de medidas urgentes de apoyo, que tal como ya expresara antes y en el propio informe adjunto, superan la capacidad operativa y de recursos del INR, requiriendo el apoyo de emergencia del Ministerio del Interior y el accionar de otros organismos de política pública cuyos mandatos no son ajenos a la realidad penitenciaria, tal como establece la ley 14.470, en materia de salud, educación y trabajo”.
Sobre el “Plan de Normalización” se indicó: “Debería naturalmente basarse en: a.- provisión urgente de recursos humanos de atención directa que atiendan a los internos elaborando Planes de Tratamiento según las Reglas Mandela b.- provisión de recursos técnicos asignados al lugar que permitan conocer y trabajar con cada interno o bien realizar derivaciones a las unidades o sectores que correspondan en base a los criterios diagnósticos elaborados por el INR y que ayuden a disminuir la población más adecuadamente c.- fortalecer las hoy débiles actividades de educación, trabajo, deporte, cultura, atención en salud mental con más intervenciones, para lo cual todo indica es ineludible contar con el apoyo de recursos de ASSE, MIDES, Ministerio de Educación, CODICEN, u otros organismos, movilizando los recursos extraordinarios de que dispone los Ministerios y organismos públicos ante situaciones emergentes de gravedad para minimizar los riesgos y daños hoy en vías de cronificación, para lo cual se requiere la gestión y rectoría del Ministerio del Interior con otras carteras a los efectos de lograr su aporte a esta emergencia de acuerdo al mandato que legalmente tienen de asistir a todos los habitantes de la República d.- medidas básicas de mejora de la alimentación, higiene, apoyo de las familias a las situaciones de emergencia (víveres y artículos básicos), adecuación de los espacios de visita en especial para los hijos de los internos, preparación de actividades educativas para los meses de verano”.